• Cambios físicos
• Anestesia general
• El riesgo de la operación
La cirugía bariátrica, también llamada cirugía gástrica, ayuda a los pacientes a perder peso al reducir el estómago y, por tanto, al reducir la ingesta de comida. Es natural sentir miedo a la cirugía pero no hay duda de que se puede reducir la ansiedad. Lo que deberías hacer es recopilar información sobre el procedimiento, consultar a tu médico y confiar en él. No deberías inventarte cosas si no estás seguro – pregunta, consulta a tu cirujano para poder entender mejor los hechos. Los miedos más comunes son: a los cambios físicos (principalmente a volver a ganar peso), a las complicaciones de la anestesia y al riesgo de la propia operación.
Aunque la cirugía bariátrica no es un procedimiento cosmético, tu cuerpo cambiará de aspecto y las afecciones relacionadas con la obesidad se curarán. Nadie pierde peso inmediatamente, es a partir de los dos meses cuando algunos cambios se hacen visibles. Es normal perder hasta una libra (medio Kg) cada 30 días tras la cirugía. Los estudios muestran que una persona pierde (durante los 2 primeros años posteriores a la operación) un 30% – 50% de exceso de peso con la banda gástrica, un 40-50% tras la operación de manga gástrica, un 60-75% tras un bypass gástrico y un 70 – 85% tras un cruce duodenal. Esto significa que si una persona tiene 50 Kg de exceso de peso, puede esperar perder hasta 15-25 Kg tras la operación de banda gástrica.
Existe una popular leyenda urbana sobre que las personas vuelvena ganar más peso del que pierden. Sin embargo, una amplia gama de estudios científicos contradicen esto con total firmeza. La mayoría de ellos informa de una recuperación de peso que va desde un 10% hasta un 15% del peso perdido. Esto significa que si una persona pierde 25 Kg tras la operación, puede volver a ganar un máximo de 3,75 Kg. Esta recuperación de peso ocurre generalmente 5 años tras la cirugía. No obstante, puede ser minimizada todavía más mediante una dieta adecuada y ejercicio. Es importante recordar que estas cifras corresponden al promedio, y ciertamente no se aplican a todo el mundo.
También existe la preocupación sobre la pérdida de pelo tras la cirugía bariátrica. Ésta ocurre debido al estrés y a la falta de nutrientes. El pelo alcanza la fase latente y se cae. Los factores nutricionales más importantes para el pelo son las proteínas y el hierro. Desafortunadamente, no se puede prevenir la pérdida de pelo, aunque esta afección es temporal.
Como nota positiva, la mayoría de los pacientes experimentan un repentino aumento de energía y motivación poco tiempo después de la operación de cirugía bariátrica que los anima a adoptar una dieta más saludable, a hacer más ejercicio y a dejar los hábitos dañinos.
Para el éxito de la anestesia, la premedicación es muy importante. Es una serie de acciones y medicamentos que deberían tomarse antes de la operación. El médico te dirá que no comas durante 24 horas antes del procedimiento. Además, puede que tengas que tomar pastillas para reducir la acidez gástrica (omeprazol o ranitidina) y dejar de tomar medicamentos anticoagulantes para reducir el riesgo de hemorragia. Estas recomendaciones te las dará tu médico de cabecera antes de la hospitalización. Los cirujanos pueden recomendar perder algo de peso. De esta manera se acorta el tiempo de la operación, se necesitan menos medicamentos, el proceso de recuperación es más rápido y las heridas cicatrizan mejor.
La mayoría de la gente no se preocupa por la operación en sí misma, sino por el dolor y el malestar que la siguen, la cicatrización de las heridas, el largo período de recuperación y el ajuste a los nuevos hábitos. Vale la pena mencionar que la mayoría de procedimientos bariátricos se realizan laparoscópicamente hoy en día. Esto significa que el cirujano opera a través de 3 pequeños agujeros que se realizan en el abdomen y que sirven como entrada para un par de herramientas específicamente diseñadas y una cámara, la cual permite al operador ver el interior del vientre. Esta técnica ofrece un enfoque menos traumático que asegura una estancia más corta en el hospital, una recuperación más rápida y menos dolorosa y unas cicatrices realmente pequeñas. Debido al pequeño tamaño de la incisión, las complicaciones de infección, fallo de las suturas o peritonitis (inflamación del revestimiento interior de la cavidad abdominal) también se ven reducidas significativamente.